Originalidad :)

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Dreamed Worlds Become True por Cristina se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional.

martes, 30 de septiembre de 2014

El mundo

Despierta y mira a tu alrededor
Rosa no es precisamente el color
De este mundo destrozado
Por la guerra y el odio humano.

Escucha los niños gritar,
Niños inocentes que hoy no tienen pan,
Lo cambiaron por un arma
Para matar, ¿no te duele el alma?

A lo lejos, las campanas del infierno
Suenan, pero nadie las escucha, es un sueño
Del que nadie quiere despertar.
Un sueño de inmundicia: eso es la humanidad.

Muerte, terror y miseria
En cada rincón del mundo, y aquí, en la Feria,
Paseando en coche de caballos, bebiendo rebujito;
Mientras el dolor continúa en países menos ricos.

Pero cambiemos de lugar un momento,
La gente también sufre por condenados inventos
De una sociedad que ya lo tiene todo
Y se dedica a molestar al de diferente modo.

¿Tú no piensas o actúas igual
Que la gente catalogada de “normal”?
¿Tú eres negro, u homosexual,
O de izquierdas, de derechas o antinacional?

Da igual lo que seas, lo que sientas o lo que pienses,
Siempre habrá alguien que te culpe por ser diferente;
Siempre habrá racistas, homófobos y cerrados de mente
Que por política, sexo y color de piel te detesten.

Despierta y mira a tu alrededor
Dime lo que ves: un mundo de dolor.
Un tiempo de guerras y odio,
De chicos que no pueden tener novio,
De gente que pide libertad a gritos,
Y les responden extremistas, a tiros;
Un tiempo de intolerancia
Donde, para la mujer, “derechos” no llega ni a palabra
En países de Oriente Medio.
Y Estados Unidos manda su ejército,
¿Para qué? ¿Para qué quiere Obama el Nobel de la Paz,
Cuando en cada guerra que surge va su parte a reclamar?

Despierta y mira a tu alrededor,
¿Terminará algún día todo éste horror?

Por Cristina 



Después de darle vueltas, me he decidido a subir esta poesía, que ya hace algún tiempo que escribí. Me inspiré en Kokoro GR y en las que ella sube a su blog (merecesseguirviviendo.blogspot.com.es), esos versos tan llenos de crítica, de fuerza, de ideales y de esperanza.

domingo, 28 de septiembre de 2014

Uno mismo

Hoy, ahora mismo, al mirarme al espejo, me he sorprendido al ver mi cara. No tenía nada especial, sólo era yo. No había cambiado mucho desde que me miré al lavarme los dientes. Pero me ha sorprendido, ha sido extraño encontrarme a mí misma en el espejo. Creo que ha sido por el contraste de estar viendo Precious (he tenido que dejar de verla, por cierto, mi estómago no da para tanto) y de repente… Pues, yo. No sé, es extraño. Me ha hecho preguntarme qué hago ahí, ¿por qué no soy cualquier otra persona? Con la cantidad de gente distinta que hay y en el espejo sólo estoy yo…

Verme así, con las luces del cuarto de baño encendidas y alumbrándome, con esa cara que me es familiar y a la vez desconocida, sin preocupaciones más allá de qué día caerá tal o cual examen; mientras en la penumbra del salón, en la tele, una chica obesa de dieciséis años es maltratada por su madre  y trata de cuidar a su segundo hijo.
Ya sé que sólo es una película, pero esa situación podría ser real para alguien en alguna parte del mundo. Y mientras tanto, me pregunto ¿por qué ese alguien no soy yo, y sin embargo yo soy yo misma? ¿Por qué no he nacido yo en esa otra punta del mundo? ¿Qué es lo que nos determina a ser quienes somos, a estar donde estamos, a tomar las decisiones que tomamos, a nacer donde nacemos? Y no es la genética, porque mis padres podrían haber vivido en Canadá y yo haber nacido en el año 2100 y las cosas serían diferentes. También serían diferentes si yo hubiera tenido otros padres, o si no hubiera tenido hermanos, o si estuviera en otro colegio u otra ciudad. Si yo hubiera tenido otra cara, otras aficiones, otros amigos, otra forma de vestir;  las cosas podrían haber diferentes. Si yo tuviera otra forma de pensar. Si al mirarme al espejo no me hiciera estas preguntas, y si fuera capaz de quedarme a ver la película entera.

Las cosas podrían haber sido diferentes. Yo podría haber sido otra persona. ¿Hubiera sido feliz siendo otra persona? Puede ser. No echaría de menos ser como soy ahora, porque nunca lo habría sido. O quizá sintiera como si me faltara algo, porque esa vida no está hecha para mí.

Igual cada uno tiene una razón de ser, y es como es por una razón. Quizá cada persona decide su vida y a partir de ahí se forja su personalidad; o quizá se le da una vida predeterminada y elige cómo quiere encararla; o puede que sencillamente uno elige cómo quiere ser y a partir de ahí se decida su vida. Incluso puede ser que tu forma de pensar y tu vida estén completamente en tus manos.

Yo sigo siendo yo misma, y sigo viviendo mi vida. Mañana, al levantarme, seguiré siéndolo, y al mirarme al espejo veré la misma cara. Sería un poco raro si no lo hiciera, ¿verdad? Yo no elegí ser así, no cogí y antes de nacer me estructuré mi vida perfectamente, “la madrugada del 26 al 27 de septiembre de 2014 te plantearás tu existencia”; pero sí que puedo elegir cómo reaccionar ante la vida. Puedo decidir si me gusta ser como soy, si quiero cambiar algo, si soy feliz…


Esta reflexión no tiene conclusión, al menos no como a mí me gustaría. He abierto un montón de interrogantes sin cerrar ninguno. Pero es que esas preguntas, por ahora, no tienen respuesta. Tratar de pensar una sólo conduce a más y más preguntas, y ya es suficiente por hoy.

sábado, 20 de septiembre de 2014

Don't cry

Me dicen que no llore. Me dicen que sea fuerte. Me dicen que siga adelante, que la vida continúa y yo con ella.
Que mi forma de ver el mundo cambiará, que esta situación mejorara; que siempre mejora. Que lo que siento ahora no durará para siempre, pero a mí me da igual que lo haga o que no.
¿Qué más me da, después de todo? ¿Qué me importa? Lo que suceda en el futuro no es más que el resultado de lo que decida ahora. Y ahora no sé qué decisión tomar. Porque no hay una elección correcta, no hay una elección equivocada. No hay un camino bueno, todos parecen trazar un círculo y desembocar aquí. En una nueva recaída.

Me digo que no puedo llorar. Que tengo que ser fuerte. Que he de seguir adelante.
Canto a todo pulmón con el volumen de la música a cien, (o todo lo fuerte que suena la música en mi móvil). Trato de desahogarme escuchando la misma canción una y otra vez y escribiendo estas líneas en la soledad acompañada que es mi cuarto.
La verdad es que quiero llorar. Que no quiero ser fuerte, que es muy difícil. Poner buena cara por las personas que me importan, sin llegar a comprender qué es lo que siento por dentro y sin saber cómo afrontarlo. Sin saber con quién hablar, sin saber en quién confiar. Contándoselo a todos y a ninguno, porque no hay nadie más a quién contárselo.

Supongo que no lloraré. Supongo que seguiré adelante, que me levantaré de nuevo y buscaré otro camino, aunque sepa que volveré a caer.

Porque en eso consiste la vida. En caerse y levantarse. En volver al principio, encajar la decepción y seguir buscando el camino correcto. Y mientras tanto, nos tragamos las lágrimas y tratamos de ser fuertes porque algún día tendremos que llegar.

Don't cry - Guns 'n Roses


sábado, 13 de septiembre de 2014

Roles

Niñas en ciencia y tecnología


 https://www.youtube.com/watch?v=GlMjo11MUiw&feature=youtu.be

Un vídeo inspirador. Cambiemos los roles preestablecidos. Que no nos de miedo mancharnos el vestido.
La ciencia y la tecnología no tienen por qué ser cosas exclusivas para los hombres, no permitamos que nos digan lo contrario.

viernes, 12 de septiembre de 2014

El vendedor de abanicos

Fui con unas amigas a un café de mi ciudad, y nos sentamos en una mesa al aire libre. Al poco de sentarnos nos abordó un hombre que vendía abanicos. Los llevaba en una bolsa de plástico y, según nos dijo, no sabía hablar inglés (sí, lo sé, información inútil y completamente aleatoria).
Nos contó su triste historia: cómo él se había pasado toda la noche pintando esos abanicos, cómo estaba en el paro y no tenía dinero para dar de comer a su mujer y a su hijo, cómo no le quedaba nada y lo único que podía hacer era pintar abanicos... Me fijé en que su supuesto trabajo era idéntico a uno que había visto yo hace poco en un chino.
Cuando se fue, una de mis amigas nos contó que ya había visto a ese hombre antes por otro barrio, y que no aceptaba limosna, que sólo quería vender su producto.

No sé si ese hombre diría la verdad o no, no sé si quería ese dinero para su familia o para drogas, no sé si habría pintado de verdad los abanicos; sólo sé que parecía sucio, desarreglado y triste; que hablaba francés, como luego demostró, y que vendía abanicos.  Sólo sé que estaba motivado por la desesperación y que no tenía, encontraba o conocía otra forma de obtener dinero. Sólo sé que cuando lo vi me dio lástima y al mismo tiempo quise alejarme de él, porque su aspecto no me inspiraba precisamente confianza.

¿Cuántas personas van a tener que acabar vendiendo abanicos para que reaccionemos? ¿Cuántas personas tendrán que vivir en la miseria? ¿Tendremos que escarmentarlo en la propia piel para comprenderlo? ¿La única manera de empatizar, de ponerse en su lugar, es que nos suceda lo mismo a nosotros?

Demos el primer paso antes de que sea demasiado tarde, confiemos un poco más en el prójimo y menos en la cantidad de dinero que lleva en los bolsillos, en la calidad de su ropa o en su aspecto en general. Porque si fuera otro de nosotros el que estuviera en su lugar, nos gustaría que nos tomasen en cuenta: que no nos trataran como un simple despojo, que la sociedad nos tendiera su mano, y no que nos diera la patada.

martes, 9 de septiembre de 2014

Un lugar al que regresar

¿Qué pasa cuando das tu confianza a la persona equivocada? Sólo es cuestión de tiempo que tu error te pase factura. ¿Y qué ocurrirá cuando lo haga? Todo tu mundo se derrumbará, porque es un mundo que habías construido alrededor vuestro, y esa persona ha salido de tu vida de forma abrupta, traicionera. El lugar que ocupaba se vuelve una herida profunda que no deja de sangrar.
Y ya podrás estar triste, que estarás solo. La soledad acaparará el tiempo que antes pasabais juntos, y nunca más podrás huir con él (o ella) de esa parte de tu vida que tanto te costaba afrontar, que tanto daño te hacía, porque ya no estará. Ya no habrá un lugar al que regresar.

Y cuando las cosas te salga mal aún le recordarás. Pensarás en poner algún mensaje, en llamar por teléfono, en mandar un correo o presentarte en su casa. Porque necesitas hablar desesperadamente con alguien y ella fue la única (o la última) persona en la que confiaste de verdad. Pero no puedes, no podrás, refugiarte en ella  ya no será una opción. Ya no habrá un lugar al que regresar.

El tiempo pasará y quizá logres superarlo, pero un simple gesto o un cartel por la calle siempre te harán recordar. "¿Cómo estará? ¿Por dónde andará? ¿Qué hará?". Tendrás ganas de que volváis a veros, a hablar como antes, como antes de que perdierais el contacto.
Pero entonces recordarás también por qué dejasteis de hablaros. Y la herida se abrirá de nuevo.

Porque ya no hay un lugar al que regresar.

sábado, 6 de septiembre de 2014

Sobre los sueños (1ª parte)

Hoy no puedo dormir. ¿La razón? Ni yo misma la sé. Llevo un rato en la cama dando vueltas y más vueltas y he decidido ponerme a escribir. Pero ¿qué puedo decir?

Voy a hablar de sueños. Los deseos más íntimos de una persona, sus anhelos más profundos; muchas veces sólo posibles en la imaginación de quien los alberga.
Los sueños y las esperanzas que tenemos de, por ejemplo, lo que nos depara el futuro, son el motor que nos impulsa a vivir y a mejorar lo que hemos llamado "vida", pero, que sin este aliciente, no sería más que el paso previo a la muerte.
Todo el mundo tiene sueños. Sueños que quiere hacer realidad, por los que luchar y no rendirse. Esos sueños nos mueven y nos ayudan a continuar en éste mundo, que sin ellos se mostraría tan vacío como en realidad lo está la gente que no sueña.

Yo también tengo sueños.

Pero la vida nos trae decepción tras decepción y pronto te das cuenta de que todo en lo que creías ya no sirve, que tus sueños nunca se cumplirán por muy fervientemente que lo desees ni por mucho que te esfuerces. Todos tus anhelos se han convertido en desengaños, y aún así tienes que seguir adelante.
¿Por qué? Ya no hay nada por lo que luchar, se ha ido todo al garete, cualquier ilusión que pudieras albergar se deshizo con el paso del tiempo y el pesimismo insaciable de esta sociedad; todo lo que alguna vez quisiste, creíste o imaginaste fue consumido por la tendencia voraz de realismo en la que ha caído el mundo. Ya no hay lugar para sueños ni para soñadores, de modo que, ¿por qué seguir adelante?
Es una buena pregunta. Hoy, ahora, lo vemos todo oscuro. No hay luz que nos guíe ni objetivos que perseguir. No hay nadie que nos tienda la mano porque nadie se fija en nosotros, no nos ven porque están cegados por su "realidad", una realidad en la que la esperanza ha muerto y el egoísmo es el pan de cada día.
Pero el sol no puede permanecer oculto para siempre, volverá y brillara de nuevo, y podremos seguir adelante. Con un poco de suerte, habrá alguien que abra los ojos y nos dé la mano, y ya no estaremos solos en ese camino donde "sueños" también es sinónimo de "realidad" y no significa "inalcanzable".

No quería hacer esto demasiado personal pero a la vez quería expresar bien lo que siento.
Y ésta es la mierda que sale cuando tratas de hacer todo y nada, cuando es tarde pero no puedes dormir, cuando no eres capaz de expresar lo que sientes y sólo escribes tonterías.
Pero aún así lo subo, porque por muy estúpido que se lea y lo poco productivo que haya sido escribirlo, es lo mejor, por no decir lo único, que puedo hacer ahora mismo y que, muy posiblemente, podré hacer jamás.

martes, 2 de septiembre de 2014

Homenaje a Ghibli

El renombrado director y animador Hayao Miyazaki, coofundador del mítico Studio Ghibli y creador de películas tan memorables como El viaje de Chihiro, La princesa Mononoke, Porco Rosso o Mi vecino Totoro; anunció su retirada tras la presentación de su última película, El viento se levanta. A pesar de que ésta no es la primera vez que trata de jubilarse, sí podría ser la definitiva, arrastrando con él toda la productora. Por eso, el canal Animation Domination ha reunido a 17 animadores y ha rendido tributo al gran director, reinterpretando escenas de varias de sus películas. El resultado es éste.

Goodbye, Ghibli


Fuente(s): youtube, cinemania

Vivir en el pasado

  Hay personas que creen no estar hechas para vivir en ésta época. Que suspiran con nostalgia y se asoman a la ventana de los libros de historia, añorando lo que pudo ser su vida en un tiempo pasado.
Hay personas que se encierran en sus ensoñaciones y no quieren salir a la realidad, porque el presente es demasiado aburrido para ellas.
Esas personas se preguntan por qué no pudieron nacer antes, en un tiempo pasado, un tiempo mejor del que sólo quedan vestigios y cuya grandiosidad conocen a través del arte que floreció en ese entonces.
Esas personas sólo son capaces de ver lo que ya ocurrió, viven en una fantasía y no quieren despertar y vivir la realidad, una realidad para ellos "imperfecta" de la que huyen refugiándose en sus sueños de una época dorara que no se repetirá.

Pero a veces, las personas tenemos que abrir los ojos y ser conscientes de lo que nos rodea. Vivir en el pasado no nos permite entender el presente, disfrutar lo que tenemos ni descubrir nuestro futuro.
Vivir en el pasado es quedarse atrapado en un lugar que ya no existe más que en el recuerdo, convirtiéndonos nosotros mismos en un recuerdo y siendo poco a poco olvidados por las generaciones venideras, que encontrarán en el presente que nosotros abandonamos su pasado idílico.

¡Despertad! Y mirad a vuestro alrededor. ¿No veis la magia de ese tiempo que añoráis, transformada en el presente que vivís? Porque está aquí, nunca se ha ido y sólo es obviada por aquellos que desprecian el tiempo que les ha tocado afrontar.
No seríamos más felices en otro tiempo porque, por mucho que nuestra alma romántica y soñadora pretenda trasladarnos a ésa otra época, éste es nuestro presente y estamos hechos para él. Nunca seremos felices si nos lamentamos por algo que nunca tuvimos, el pasado pertenece al pasado y vivir en él es negarnos a nosotros mismos.
En la foto, Gil Pender (Owen Wilson), de Midnight in Paris (por Woody Allen).

Lost Stars (Begin Again)

Lost Stars
Por Keira Knightley
(B.S.O Begin Again)

Bueno, vi ésta película hace poco en el cine (en versión original), y me enamoré perdidamente de ella, por su banda sonora. Keira tiene una voz increíble, y ésta canción es preciosa. Se la recomiendo a todo el mundo.

 

Please, don't see just a girl caught up in dreams and fantasies. 

Please, see me reaching out for someone I can't see. 

Take my hand, let's see where we wake up tomorrow. 

Best laid plans; sometimes are just a one night stand. 

I'd be damned; Cupid's demanding back his arrow. 

So let's get drunk on our tears and... 



God, tell us the reason youth is wasted on the young. 

It's hunting season and this lamb is on the run. 

Searching for meaning... 

But are we all lost stars trying to light up the dark? 



Who are we? Just a speck of dust within the galaxy. 

'Woe is me' if we're not careful turns into reality. 

Don't you dare let all these memories bring you sorrow. 

Yesterday I saw a lion kiss a deer. 

Turn the page; maybe we'll find a brand new ending. 

Where we're dancing in our tears and... 



God, tell us the reason youth is wasted on the young. 

It's hunting season and this lamb is on the run. 

We're searching for meaning... 

But are we all lost stars trying to light up the dark? 



I thought I saw you out there crying... 

I thought I heard you call my name... 

I thought I heard you out there crying... 

We're just the same... 



God, tell us the reason youth is wasted on the young. 

It's hunting season and this lamb is on the run. 

We're searching for meaning...

But are we all lost stars trying to light up the dark? 

Are we all lost stars trying to light up the dark?


Salir adelante

Hay cosas que no se pueden expresar con palabras, les vienen demasiado pequeñas. A otras, sin embargo, las palabras les vienen demasiado grandes.
No sé si éste es el primer o el segundo caso, o puede que simplemente sea yo y mi imposibilidad de explicar mis sentimientos, y todo esto sea en realidad una pérdida de tiempo que se pueda resumir en una línea. Sea lo que sea, los hechos no cambian, y lo que me hacen sentir tampoco.

Quiero olvidarme de todo y enterrarlo bien profundo para que nadie lo vuelva a ver jamás. Quiero gritarlo a los cuatro vientos y que el mundo se entere de una vez por todas. Quiero no creerle y enfadarme. Quiero creerle y dejarme arrastrar por la marea. Quiero entender por qué me afecta tanto. Dejemos un segundo lo que quiero, no estoy sacando nada en claro.
Estoy dolida, no lo puedo evitar. También estoy enfadada. Conmigo misma, por dejarme embaucar. Con la otra parte por quererse aprovechar.
¿Y qué si al final es verdad? La persona que fue ya no está, nosotros mismos nos ocupamos de que así sea. Verdad o mentira, he comprendido que, hasta cierto punto, no necesitaba creerle para quererle, pero el engaño duele y no hay marcha atrás.

De modo que, en cierto sentido, ha muerto. Y con él ha muerto una parte de todos nosotros. ¿Qué nos queda ahora? Dolor.
Tratamos de seguir adelante como si nada, pero no lo hacemos. No podemos. Es demasiado cruel. No podemos hacer como si nunca existiera, pasar página no es arrancar la que ya habíamos escrito.
¿Qué podemos hacer entonces? Apechugar. Aceptar lo que ha pasado y seguir adelante. No olvidar pero tampoco recordarlo con rencor. Pasó porque tenía que pasar, y podemos aprender de ello.

"La vida viene a ser nació y murió. Son los pequeños detalles del camino los que marcan la diferencia, porque en realidad es siempre igual, siempre lo mismo". O algo así dice Neil Gaiman en uno de sus libros (lo he adaptado un poco). Este detalle puede marcar nuestras vidas, así que hay que atesorarlo y no arrepentirnos de ello. Sufrir es natural y es humano, y nos permite saborear mejor la felicidad que está por venir.
Me va a costar superar ésto. Es una herida que no termina de cerrarse, al contrario, parece abrirse más con cada segundo que pasa, y cuando apenas consigo quitármelo de la cabeza centrando mi atención en otra cosa puedo verlo acechando en los recovecos de mi mente; dispuesto a salir de nuevo a la luz, dispuesto a doler otra vez. Pero, como toda herida, terminará sanando, su cicatriz será sólo un recuerdo y aprenderé de ella.

Por último, como aspirante a escritora, me gustaría cerrar diciendo que un escritor es la suma de sus experiencias (Un invierno en la playa), tanto buenas como malas. Antes pensaba que yo no había empezado aún mi vida como escritora porque mis experiencias han sido bastante cortas y nada extraordinarias. Ahora puedo decir que mi carrera comienza.

Sé que os quiero y que nunca lo olvidaré.

lunes, 1 de septiembre de 2014

Como una chica

¿Qué significa hacer algo "como una chica"?


Parad un segundo a pensar en la pregunta. ¿Qué significa para vosotros hacer algo "como una chica"? ¿Y para la sociedad? ¿Coincide?

Hoy en día el mundo está plagado de machismo, pero aún hay personas que luchan por cambiarlo.


https://www.youtube.com/watch?v=XjJQBjWYDTs&feature=youtu.be

Soy una chica, y quiero que alguien me explique por qué mi forma de hacer las cosas tiene que ser peor que la de cualquier otro. Quiero que me expliquen por qué tengo que pegar más flojo, correr más lento o tirar con menos puntería o fuerza. Que me expliquen por qué, por ser mujer, todas mis acciones quedan automáticamente relegadas a un nivel inferior, tachadas de peor calidad que las de un hombre.
Y si hay alguien capaz de hacerlo, que piense dos veces sus palabras, porque las chicas también sabemos argumentar, pensar, razonar y somos capaces de rebatir las injusticias. Como ésta.

No dejéis que el hacer algo "como una chica" signifique hacerlo mal, de forma torpe o estúpida. Que sea hacerlo como realmente tiene que hacerse, con empeño, ganas y voluntad, que signifique hacerlo bien, ser el/la mejor.

¿Por qué "correr como una chica" no puede significar ganar la carrera?


Cambio de planes

El curso ya ha acabado, de hecho, está a punto de empezar de nuevo; y yo vengo a subir otra entrada.
No sé por qué lo hago, ni de qué quiero hablar. Hay mil cosas bullendo en mi cabeza, millones de ideas que quiero expresar y dar a conocer al mundo, y a la vez, no hay nada que decir, nada que escribir aquí, nada que compartir.

¿Cuál es la finalidad de éste blog?

Antes estaba muy clara, era un trabajo de clase. Pero ¿qué queda ahora? ¿Por qué lo continúo?
Quizá me parece una buena manera de contribuir al mundo, de que perdure algo de mí cuando yo ya no esté. O quizá me parece una buena manera de liberarme, de ser lo que quiero y decir lo que quiero sin . Aquí, en este espacio al alcance de todos pero que nadie leerá nunca.
Puedo usarlo de diario o escribir reportajes. Puedo subir una poesía o un vídeo que encuentre en youtube. Puedo mostrar mis sentimientos o mentir descaradamente y a todo el mundo le importará un bledo, pero yo me habré desahogado a gusto.

Así que creo que eso es lo que será éste blog de ahora en adelante. Todo y nada.

Como no sé qué más decir por hoy (muy típico, me propongo subir una entrada y luego no se me ocurre nada), lo voy a dejar aquí.